CASABLANCA

CASABLANCA
FOTO DE GONZALO MONTÓN MUÑOZ

jueves, 3 de diciembre de 2015

RESEÑA DEL LIBRO DE FERNANDO AÍNSA, "DESDE EL OTRO LADO. PROSAS CONCISAS"

TESTAMENTO LITERARIO Y VITAL



    Un lector poco avisado que conociera la trayectoria profesional de Fernando Aínsa –periodista, ensayista, narrador, poeta, agitador cultural, miembro de las Academias de las Letras de Uruguay y Venezuela, y un largo etcétera- y se dejara influir por las apariencias, nos referimos a las 138 páginas y al pequeño formato de su última publicación, Desde el otro lado. Prosas concisas (Pregunta, 2014), podría incurrir en el error de pensar que se trata de una obra menor o, lo que sería peor, de una boutade de su autor, pero nada más lejos de la realidad: es un libro ingenioso, sí; divertido, también; breve, sin duda, pero nunca menor. A nuestro juicio es un testamento literario y vital que debemos empezar a leer por su final, por esa “Sensación” de sus “Conclusiones provisorias”, tan breve como significativa: “Siento últimamente que la muerte se empeña en sacarme los calcetines.”
     
Efectivamente, sintiendo el aliento de la muerte en la nuca, Fernando Aínsa, el “viejo poeta”, se sienta en el sofá, mira el pasado y, resignado, sin esperar ”el resplandor de una quinta edición”, escribe en plena libertad esta miscelánea compuesta por relatos, microcuentos, aforismos, reflexiones, etc., con ese tono humorístico y poético tan suyo, con la doble pretensión de divertir(se) y de hacer inventario vital y literario, pero todo sin aspavientos ni grandes pretensiones, como jugando con la escritura y con el lector.
  Sus textos presentan homenajes explícitos a escritores como Borges, Cervantes, Vila-Matas, Machado, Ángel González, etc., e implícitos, como en ese magnífico relato titulado “El ascensor con monedas”, en el que versiona con personalidad propia el tema del doble, presente, por ejemplo en el mítico “William Wilson” de Poe, y en todos aquellos, como Wilde, Stevenson, Dostoievsky, Maupassant, Woolf, Borges y tantos otros grandísimos escritores que lo han tratado, o esos cuentos esféricos tan cortazarianos como son “Cruzándome” y “Un espejo velado por los años”. Así pues, todos los textos que componen Desde el otro lado incluyen referencias, guiños literarios a autores que, en mayor o menor medida, han dejado huella en su mundo creativo, incluso, en unas pocas líneas, como sucede en el titulado “Poética con espejos”, Aínsa resume con precisión su evolución narrativa desde su época juvenil, stendaliana, pasando por la estética deformada de  los espejos cóncavos de Valle y Kafka, hasta llegar a los mundos entrevistos a través del espejo de Carroll.
  Desde el otro lado destila ironía por todas sus páginas, pero más si cabe en ese apartado divertidísimo titulado “Cosas de escritores”, en especial en ese decálogo burlesco e irreverente, “Los diez mandamientos del escritor”, en el que se ríe a mandíbula batiente del acto sagrado de escribir, creemos que también de sí mismo, porque de algún modo sus mandamientos bien podrían resumirse en uno: no tomarás al escritor que llevas dentro muy en serio o, como mínimo, lo despojarás de certidumbres y verdades absolutas, por eso para Ainsa sus conclusiones son “provisorias”, sus aforismos son “presuntos”, sus dilemas “falsos”, sus caminos de “ida y vuelta”.
    En definitiva, me atrevería a asegurar que el sentido del humor de su escritura, espontánea, cervantina -fustigadora a la par que compasiva-,  poética y, en ocasiones, absurda, es una parte esencial de la personalidad de Fernando, lo que junto con el toque lírico,  tal vez sea lo más definitorio de su obra y de su ser. Al fin y al cabo, uno escribe como es.
         En este mirar hacia el pasado, en esta esencial recapitulación literaria, en este ver las cosas Desde el otro lado (una zanja, el espejo, la otra orilla, los ojos de los otros, etc.) en esta lectura inversa, hacia atrás de su libro, llegamos a su conclusión, al magnífico prólogo de Fernando Valls, el texto más largo de todos, en el que se resume de manera magistral la trayectoria personal y profesional de este escritor nómada, ciudadano del mundo, cuyo “amor por la patria no tiene fronteras” -Uruguay, París, Zaragoza, Oliete- y se nos dan algunas claves para entenderlo mejor: es el momento de leer hacia delante esta miscelánea tan divertida como definitoria, en modo alguno menor. Disfrútenla en su intensa brevedad.
 Reseña publicada en TURIA NÚM. 116
Fernando Aínsa, Desde el otro lado. Prosas concisas, Madrid, Pregunta Ediciones, 2014.



No hay comentarios:

Publicar un comentario